Por: Carolina Bustamante
Según el contralmirante Gabriel Alfonso Pérez, comandante de la Fuerza Naval de Oriente, el ataque se dio con 5 cilindros y balones bomba sobre el puesto de Infantería de Marina, que se encuentra ubicado en el municipio de Arauquita, sobre el río Arauca. Uno de estos cilindros bomba no detonó y horas después un equipo antiexplosivos que revisaba la zona para garantizar la seguridad de la población civil cayó en una trampa, detonó y dejó a un infante de marina y un suboficial heridos.
Aseguró igualmente el contralmirante Pérez, que la zona sigue siendo inspeccionada por personal de antiexplosivos para garantizar la seguridad de la misma por esta acción que le atribuye a la guerrilla del ELN.
“En esta zona delinque el Frente Domingo Lain Sanz del ELN, y tanto el modo de operación para este atentado, el tipo de trampa y los artefactos explosivos utilizados son muy característicos de este frente y por eso le atribuimos el atentado a esta guerrilla”. Para el contralmirante Pérez estas acciones no solo tienen repercusiones en la Fuerza Pública, ponen en un alto nivel de riesgo a la población civil que habita en la zona.
“Los artefactos improvisados no discriminan si es población civil o no. Inclusive, las trampas que ellos (ELN) ponen son por fuera de la unidad militar; un área en la que cualquier persona puede transitar y por eso el grupo de antiexplosivos en la revisión que hizo, para tratar de encontrar si habían quedado más artefactos fuera del perímetro del puesto de control, cayeron en una de las trampas”, señaló Pérez, quien ratificó que es completamente posible que estas acciones afecten directamente a la población civil.
Así mismo, dio a conocer que uno de los uniformados heridos, el infante de marina, se encuentra herido en una pierna y un pie; y el otro, un suboficial, tiene su cuerpo cubierto con esquirlas producto de la detonación; fueron trasladados a Bogotá, en un avión medicalizado de la Fuerza Aérea, para ser internados en el Hospital Militar de la capital del país y recibir toda la atención médica.
Pese a lo ocurrido, el contralmirante Gabriel Alfonso Pérez manifiesta que tanto la ofensiva militar como la protección a la población civil se mantendrá y que se realizarán las acciones necesarias para dar con los directamente responsables pro este hecho.