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La tradición y el arte de la peluquería en Nariño

37 años trabajando en la belleza convierten a Oscar Cajiao, en uno de los estilistas más reconocidos en Nariño.

Por: Janneth Jurado - Radio Nacional Pasto

Creatividad y conocimiento, así como el pintor prepara su óleo, sus herramientas antes de hacer una obra de arte, así estos estilistas nariñenses, hacen un análisis de las facciones, características físicas de personalidad y rasgos físicos, emplean los mejores materiales, porque un cambio de estilo es tan importante para ellos como si lo hicieran en sí mismos. El resultado es el marco del rostro.

37 años trabajando en la belleza convierten a Oscar Cajiao, en uno de los estilistas más reconocidos en Nariño, hijo adoptivo de Pasto, fue el primero en ser invitado a un Concurso Nacional de Belleza, peluquería y estética, ganador de las Tijeras de Oro de Colombia con la bandera del departamento, la historia de vida de Oscar muestra cómo la vocación se adquiere desde la cuna.

“Yo, trasquilaba las muñecas de mis hermanitas, luego seguí con ellas, así empiezo la inclinación por mi carrera”, cuenta Óscar.

De nada serviría acumular conocimientos y destrezas si no se comparten con los demás, luego de esta reflexión Oscar empieza a formar personas en el oficio de la peluquería, en Pasto y otros municipios de Nariño, brinda así a muchas personas hombres y mujeres la posibilidad de tener una actividad económica que sirva de sustento económico para sus familias.

“El verdadero artista es el que comparte sus conocimientos con otros, el 80 por ciento de los salones de Pasto son de exalumnos míos. Íbamos a las cárceles, a otros municipios a hacer las prácticas”, señala.

Elizabeth Chamorro, comunicadora social y periodista, decide dedicarse a la belleza, su madre es estilista y creció observando cómo trabajaba, relata que la labor de resaltar la belleza de hombres y mujeres es un compromiso personal, que sus clientes pasan a ser amigos y amigas de confianza.

“Hoy en día cada quién lleva su cabello como lo quiere llevar, hasta las canas están de moda”, dice.

Elizabeth incursiona en otra faceta de la belleza, el tratamiento de la piel y el cabello a nivel profundo, las uñas, y el cuerpo. Ir a un centro de belleza cada vez ofrece al cliente la opción que necesite para arriesgarse al cambio. Recomienda siempre asegurarse del tipo de profesional que atienda sus inquietudes

“Nosotros nos capacitamos semanalmente y mensualmente, a una amiga le hicimos un cambio extremo que ni ella podía creer”, comenta.

Hombres y mujeres buscan más que un corte de pelo o un cambio de color, es la asesoría para resaltar lo mejor que tienen, una imagen que ayuda a mejorar el autoestima, estas personas asumen con responsabilidad la confianza de quienes acuden a ellas, para verse mejor, sentirse mejor. En esos espacios de tiempos, entre tratamiento y tratamiento, se navega en el acontecer diario y los sentimientos de dos seres humanos que entablan una amistad.

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