Las ballenas llegaron a Bahía Solano
A todos los encantos naturales que tiene Bahía Solano se le suma, por estos días, la visita de casi 2000 yubartas que llegan a sus cálidas aguas.
Hasta mediados de octubre estos enormes seres del mar, que adultos pueden alcanzar los 16 metros y pesar unas 40 toneladas, juegan, se aparean y dan a luz a ‘pequeños’ ballenatos de unos 4 metros en promedio.
En mayo llegaron los primeros individuos a aguas colombianas, haciéndole el quite a la corriente fría de Humboldt, que acompaña su recorrido por el Pacífico, desde la Antártida hasta el Ecuador.
Un paseo por estas aguas permite admirar estas ballenas jorobadas que, por su comportamiento, parecen posar para las cámaras de turistas y chocoanos que salen a observarlas.
Incluso, hay días en que llegan a hacer sus piruetas cerca de las playas de este municipio, produciendo diferentes emociones entre sus afortunados observadores.
Pero al navegar esta zona del Pacífico también se pueden observar delfines, atunes, tortugas caguama y, ya en tierra, caracoles y diferentes especies de cangrejos, como los ermitaños y otros pequeños de color rojo que escapan rápidamente de las pisadas de los visitantes.
Casi 10 playas, algunas de ellas deshabitadas, están a disposición de turistas y solaneños para hacer careteo, broncearse o simplemente desconectarse del mundo y descansar. Entre las más reconocidas están las de Huina y del Valle.
Además del océano, Bahía Solano limita también con una extensa selva húmeda tropical que permite hacer turismo de naturaleza, en el que se puede caminar y observar la diversa fauna que habita esta región, además de disfrutar de diferentes cauces y cascadas de agua dulce.
Igualmente, la gastronomía de la región, abundante en frutos del mar, es otro de los grandes atractivos de Bahía Solano y de todas las poblaciones del Pacífico colombiano, como Nuquí, Buenaventura y Tumaco, en donde también se pueden avistar ballenas.
