“Comunidades en desplazamiento de Alto Baudó requieren atención urgente”: defensor del Pueblo

Cinco días se cumplen de combates permanentes entre grupos armados ilegales en la zona de Alto Baudó en Chocó, razón que ha generado un llamado de urgencia de la Defensoría del Pueblo para brindar asistencia humanitaria a población indígena que se han desplazado para proteger sus vidas.

Se trata de las comunidades de Dipurdú, Siorodó, Konodó, Santa Catalina de Catrú, cuyos habitantes han estado huyendo de sus territorios de manera progresiva. Desde el pasado lunes 14 de septiembre que se empezaron a presentar, según la Defensoría del Pueblo, enfrentamientos entre la guerrilla del ELN y Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AUC).

El defensor del Pueblo Carlos Camargo Assis hizo un llamado para que se activen los protocolos necesarios para la atención de 450 personas en situación de desplazamiento de esta zona del departamento.

“Hago un llamado a las autoridades, para que activen los protocolos y las rutas de atención humanitaria integral de manera oportuna y diferencial ante las graves denuncias de violación de Derechos Humanos en el municipio del Alto Baudó en el Departamento del Chocó”, señaló el funcionario.

Las comunidades indígenas aseguran que han sido recurrentes estas acciones de grupos armados ilegales que impiden, no solamente la libre movilidad de los habitantes de territorios ancestrales, sino también el desarrollo económico, social, cultural y político de estas poblaciones.

“Todos los grupos al margen de la ley quieren tener el control de nuestro territorio, porque nuestro resguardo es el paso de todo lo que viene de centro y de Norteamérica, bien sea legal o ilegal, contamos con 120 mil hectáreas y no ha sido fácil nuestra resistencia en medio de tantas dificultades. El control debe estar en manos de las comunidades y no de los grupos armados; muchas veces el Estado colombiano nos ha descuidado; nos sentimos en el total abandono”, aseguró Helfer Andrade, coordinador de la mesa indígena del Chocó.

Se conoció que las 200 familias se encuentran resguardadas en la comunidad de Catrú Central. El defensor del Pueblo aseguró que el continuo accionar armado en esta zona estaría afectando también a la población que reside en la cuenca del río Dubaza.