El pasado 2 de mayo se conmemoró el Día Internacional contra el Bullying o Acoso Escolar, una problemática que afecta a millones de niños y adolescentes en todo el mundo. Se trata de comportamientos que se repiten con el tiempo y que afectan gravemente a las víctimas.
Según datos de la Procuraduría General de la Nación publicados en octubre de 2024, en lo corrido de dicho año se habían reportado 1.515 casos de acoso escolar, 610 de violencia sexual y 399 situaciones de ciberacoso en las instituciones educativas visitadas por el organismo. Estas cifras evidencian la necesidad urgente de abordar la violencia escolar de manera integral, especialmente cuando buena parte de los casos reportados involucran a estudiantes como presuntos agresores.
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Para hablar sobre las señales de alerta y los pasos que deben tomar tanto las instituciones educativas como las familias frente al acoso escolar, en Radio Nacional de Colombia conversamos con Fabio Poveda, psicólogo con más de 25 años de experiencia, magíster en psicología y especialista en psicología clínica del niño y del adolescente. Actualmente, se desempeña como coordinador de bienestar escolar del colegio Liceo del Caribe en Bogotá.
R.N.: ¿Cuáles son las señales más comunes que indican que un estudiante podría estar siendo víctima de acoso escolar?
F.P.: Existen muchas señales, no hay una lista única. Pero podemos encontrar una amplia tipología de síntomas, especialmente cambios repentinos en los hábitos comunes del estudiante.
Algunas señales a tener en cuenta son:
- Deterioro en la presentación personal
- Cambios en las rutinas, especialmente las de estudio
- Bajo rendimiento académico
- Apatía frente a actividades escolares o extracurriculares
- Disminución en la calidad o entrega de tareas
- Aislamiento social y alejamiento de sus grupos habituales
R.N.: ¿Cómo debe actuar una institución educativa desde el primer momento en que se detecta o reporta un caso de bullying?
F.P.: Es importante aclarar que no todos los conflictos entre estudiantes constituyen acoso escolar. El bullying debe ser tipificado correctamente para diferenciarlo de otro tipo de conflictos.
Una vez identificado como acoso, se deben activar los protocolos establecidos. El colegio debe tener implementada la Ruta de Atención Integral para la Convivencia Escolar, que permite actuar de manera ordenada, informada y justa.
R.N.: ¿Qué tipo de acompañamiento se recomienda desde el área de orientación o psicología, tanto para la víctima como para el agresor?
F.P.: La ley exige un abordaje integral. Esto significa que no solo se atiende a las víctimas, sino también a los agresores. A estos últimos se les debe ofrecer un acompañamiento correctivo y formativo, con la participación activa de sus familias.
Lo que se busca no es únicamente una sanción, sino una verdadera transformación, una reparación real del daño y un compromiso con el cambio de comportamiento. La escuela debe facilitar un espacio en el que todos los implicados puedan reconstruir relaciones en términos positivos.
R.N.: ¿Cuál es el papel de la familia frente a un caso de acoso escolar? ¿Cómo pueden apoyar sin agravar la situación?
F.P.: La familia cumple un rol fundamental. Debe entender que la educación es una suma de voluntades entre escuela y hogar. Es clave que los padres estén comprometidos con los valores institucionales y que se involucren en el proceso educativo de sus hijos, entendiendo que el respeto por los demás es parte de la formación.
El acompañamiento debe hacerse desde el diálogo y el entendimiento, no desde la confrontación.
R.N.: ¿Qué tan importante es el trabajo conjunto entre familia y colegio para erradicar el bullying y crear un entorno seguro para los estudiantes?
F.P.: Es fundamental. La participación activa de todos los actores de la comunidad educativa: padres, docentes, directivos y estudiantes, es lo que permite construir un entorno seguro.
Debemos encontrarnos constantemente para conversar, generar acuerdos y trabajar juntos. La sociedad cambia, y con ella, los desafíos de la escuela. Por eso, la educación debe ser entendida como un vehículo de transformación social.
Escucha la entrevista completa en el audio adjunto a esta nota.