De acuerdo al estudio, el 70% de las unidades agrícolas familiares corresponden sólo al 5% del territorio rural nacional, quienes poseen menos de cinco hectáreas, mientas que el 0,4% de todas las unidades productivas tiene más de 500 hectáreas que ocupan el 46% del territorio rural.
“Esto nos muestra la necesidad de una reforma agraria real que le permita a la gente acceder a las tierras y poder redistribuir mejor esas unidades agrícolas para que esos pobladores que ocupan tan sólo el 5% del territorio pero que son el 70% de las unidades de producción, con el fin de que puedan tener mayor participación en las tierras”, dijo el ministro en los micrófonos de la Radio Nacional de Colombia.
Iragorri aseguró que la reforma agraria se adelanta con la transformación institucional que será entregada en diciembre.
Dicha reforma buscará fomentar el acceso a las tierras, a través de subsidios mediante la compra de tierra por parte del Gobierno y la entrega de proyectos productivos eficaces, asunto que está contemplado en el Plan Nacional de Desarrollo.
“La reforma agraria integral es la necesidad de trabajar en un texto con los datos que tenemos hoy. En síntesis podemos decir mayor acceso a tierras para la población campesina, una mejor distribución de esas tierras para que ese 70% de la población puedan tener un mayor territorio para trabajar”, señaló.
El jefe de la cartera de agricultura aseguró que sólo si el campo colombiano es rentable y ofrece alternativas de negocio a sus pobladores, ellos no dejarán las tierras, razón por la que el Gobierno viene apoyando proyectos asociativos y productivos en distintas regiones para atraer nuevamente a los jóvenes.
“Si seguimos al paso que vamos en 2020 el incremento en la población mayor de 60 años en el campo será de más del 40%, es decir, se nos envejecería el campo, por eso hay que trabajar y atraer a los jóvenes”, dijo.