La nueva tendencia que está revolucionando los árboles de Navidad: ¿Adiós a las bolas navideñas?
La temporada navideña es una de las más esperadas del año, con ella llegan los rituales que dan vida al hogar: especialmente, elegir el árbol perfecto. Sin embargo, este año los árboles están dejando atrás la decoración tradicional para dar paso a nuevas tendencias que buscan más emoción, más significado y más estilo.
La nostalgia toma el protagonismo: Polaroids en el árbol de Navidad
La tendencia que lidera este año es reemplazar los adornos tradicionales por fotografías tipo Polaroid con recuerdos familiares, de pareja y amistades. Esta propuesta busca que el árbol sea más que un elemento decorativo: un espacio para revivir momentos significativos y compartir historias en torno a él.
Las imágenes se cuelgan con clips, cordeles, mini ganchos de madera o incluso luces tenues como marco. La idea central es convertir el árbol en un álbum navideño tridimensional, reforzando la sensación de unión y memoria afectiva durante las fiestas.
Incluso quienes no cuentan con un árbol de Navidad físico pueden recrearlo en la pared formando la silueta de un pino con fotos de familia, amigos o pareja, y complementarlo con luces cálidas, cintas, estrellas u otros accesorios decorativos. El resultado es un árbol único, emocional y lleno de identidad que convierte cada rincón del hogar en un homenaje visual a los momentos más especiales del año.
El regreso de lo textil: moños por todas partes
Otra de las corrientes más fuertes para esta Navidad es la aparición de moños de tela en múltiples tamaños, elaborados en listón, satín, terciopelo, lino o arpillera. Aunque se permite la creatividad, predominan los moños pequeños distribuidos de manera uniforme alrededor del árbol, creando un efecto minimalista, delicado y elegante.
Para quienes buscan un estilo más clásico, los moños grandes en la copa o en espiral también son tendencia, especialmente en tonos rojo vino, dorado, marfil y verde profundo. Esta propuesta resalta porque reemplaza la compra de adornos industriales con manualidades y elementos hechos en casa, lo que fortalece la creatividad familiar y la sostenibilidad.
Perlas: el nuevo símbolo de elegancia navideña
La tercera gran tendencia son las perlas como elemento decorativo, presentes en hilos, cadenas o piezas individuales. Pueden usarse bordeando el árbol como si fueran luces o transformarse en figuras como estrellas, corazones y lazos. La idea principal es crear volumen y brillo sin caer en la saturación visual.
El uso de perlas se adapta tanto a árboles blancos como naturales o nevados, y permite combinar modernidad con un toque clásico, razón por la que ha conquistado hogares, centros comerciales y espacios empresariales.
Las tres tendencias tienen un denominador común: el árbol de Navidad deja de ser un objeto ornamental para convertirse en un símbolo emocional y personalizado. Desde los recuerdos capturados en fotografías hasta la calidez de los moños hechos a mano y la elegancia de las perlas, la temporada apuesta por conectar a las familias con sus memorias y tradiciones.